Espacio de Juego para Perros
¿Qué es el espacio de juego?
El espacio de juego es un espacio de aprendizaje, y esto qué quiere decir…
Lo que quiere decir es que, los guías y/o tutores activan al perro en un punto concreto a nivel físico, emocional, social, y cognitivo.
De forma más coloquial, es lo mismo que puede hacer un profesor ante un grupo de alumnos, para que el profesor pueda enseñar y los alumnos aprender. El profesor pide que los alumnos se sienten, pide silencio para iniciar la clase, y pide que abran sus libros para iniciar la lección del día.
Todo esto favorece la concentración y la atención hacia el profesor, para que el aprendizaje sea mayor, y de más calidad.
¿En qué consiste el espacio de juego?
El espacio de juego consiste en dar forma a la tendencia innata de caza, es decir, lo que hacemos es dar forma a algo que el perro trae de serie por ser un perro de forma estructurada y con reglas.
¿Qué necesitamos para el espacio de juego?
Para el espacio de juego necesitamos un juguete que permita: Ser mordido por el perro con facilidad, y además cómodo para la boca del perro.
Ejemplos de juguetes:
- Moderadores de una o dos asas (existen diferentes durezas)
- Pelotas con cuerdas (existen diferentes durezas)
Una aclaración importante, es que en muchas ocasiones utilizamos juguetes demasiado duros para el perro con el que vamos a trabajar, a pesar de ser perros de bocas potentes y esto distorsiona por completo su construcción.
Utilizar juguetes demasiado duros pueden provocar que el perro no quiera jugar por este motivo, a pesar que le guste mucho.
Particularmente siempre sugerimos juguetes blandos, que permitan ser mordidos con seguridad y comodidad por el perro…Ya tendremos tiempo de utilizar juguetes más duros si es necesario.
¿Cómo construimos el espacio de juego?
Para poder construir/activar/usar el espacio de juego de forma reglada y estructurada, es necesario añadir indicaciones y señales/comando.
En el artículo de hoy, nos limitaremos a explicar su construcción, es decir, vamos a explicar cómo iniciamos el trabajo, teniendo en cuenta que una vez aprendido, podremos ampliar y mucho qué podemos enseñar y aprender dentro de este.
En el proceso inicial de enseñanza-aprendizaje, estructuramos espacio de juego en tres bloques diferenciados, trabajando específicamente habilidades emocionales y sociales en cada uno de ellos.
Algo importante, es que cada una de las indicaciones y señales/comando que utilicemos deben llevar asociada la emocionalidad correspondiente:
- La indicación de inicio, por ejemplo, A JUGAR, tendrá una emocionalidad positiva y alegre.
- NOMBRE, MUY BIEN, MUERDE, y TRAE tendrán también una emocionalidad positiva y alegre.
- SUELTA tendrá una tonalidad positiva informativa menos impetuosa.
- La indicación de final, por ejemplo NADA MÁS, tendrá una emocionalidad informativa menos impetuosa.
Bloque I:
El bloque I está enfocado principalmente, aunque no exclusivamente, a activar la emocionalidad adecuada, mantener la motivación por el juego competitivo con el tutor y/o guía, mantener la mordida en el juguete, y luchar para ganarlo.
- NOMBRE, enseñamos el juguete y A JUGAR como indicación de inicio (importante señal de inicio).
- Moveremos el juguete sin dejar que llegue a morderlo para activarla.
- Una vez activado (nunca antes), pediremos MUERDE y cuando lo haga confirmamos con MUY BIEN jugando con el perro. Los movimientos cuando juguemos, siempre aconsejamos que sean de izquierda a derecha y nunca de arriba-abajo (esto evita daños en el cuello). Haremos que el juego sea competitivo jugando mucho con él/ella y no pediremos SUELTA en ningún momento (Vamos a darle caña!!!!!!). El jugar sin pedir SUELTA en este primer bloque, permite crear el concepto que lo divertido del juego es tironear con vosotros, dando un alto valor al factor social y disminuir el valor del juguete.
- Una vez hecho el paso anterior, dejaremos que gane el juguete cuando lo sacuda o cuando haga fuerza hacia atrás, pero también podrá perderlo si mordiese con desgana o no prestase atención.
IMPORTANTE:
Tenemos que enseñar al perro que si se esfuerza nos puede ganar, y no siempre ganar nosotros ya que esto puede bajar la motivación.
¿Cuántas veces habéis hecho algún deporte o actividad en la que siempre perdéis?
Esto desmotiva mucho
Al igual que lo anterior, también hay que enseñar al perro, que debe prestar atención y se debe esforzar en el juego, ya que de lo contrario le ganamos.
El espacio de juego es un juego colaborativo-competitivo.
Tendremos dos formas de dejar que gane:
- Victorias parciales: Consisten en dejar que os arrastre, cuando tire hacia atrás o sacuda el juguete.
- Victorias totales: Consisten en soltar el juguete y dejar que se lo lleve.
- Después de haber ganado el juguete, pediremos TRAE animándola mucho, y una vez que os lo haya acercado, diremos MUY BIEN+MUERDE, volviendo a jugar con él/ella.
IMPORTANTE:
El mayor porcentaje de perros, cuando ganan el juguete, se lo llevan y no te lo acercan. Esto no quiere decir que haya perros que sí que lo hagan, pero lo normal es que se lleven el trofeo.
Para enseñar la señal TRAE, podremos ayudarnos de una correa que el perro llevará en el arnés o collar
Repetiremos la señal TRAE en varias ocasiones al mismo tiempo que le guiamos (guiar y no dar tirones) con la correa a vuestra posición.
IMPORTANTE: Daremos mucha importancia y relevancia a la parte de morder y tironear ya que queremos que sea un juego social, donde lo divertido sea disputar el juguete contigo. Para ello el tiempo de tironeo tendrá especial relevancia, y además en el bloque I no le pediremos SUELTA en ningún momento.
Bloque II:
Este bloque está enfocado a trabajar el autocontrol y la subordinación mediante las indicaciones SUELTA.
- Una vez que hemos dejado que gane en varias ocasiones pediremos SUELTA (petición y no exigencia). Para ello cogemos el juguete, paramos cualquier movimiento, y pedimos SUELTA, mostrando una emocionalidad más tranquila, pudiendo pasar:
- Que suelte, y se mantenga estable delante del juguete sin intentar morderlo. Si se da esta opción diremos MUY BIEN+MUERDE repitiendo el bloque I.
- Que suelte, pero intente morderlo sin haberle pedido que lo haga, y que lo consiga. En este caso volveremos a pedir SUELTA. Esto lo repetiremos las veces necesarias hasta que consigamos que suelte y se mantengan estable delante de este. Una vez que haya lo soltado y se mantenga estable, sin intentar morderlo, diremos MUY BIEN+MUERDE repitiendo el bloque I.
- Que no suelte. En este caso después de decir SUELTA, haremos una ligera molestia debajo de la lengua (SUELTA+ligera molestia). Una vez que haya soltado y se mantenga estable delante del juguete, diremos MUY BIEN+MUERDE repitiendo el bloque I.
IMPORTANTE: Repetiremos entero el bloque II en varias ocasiones independientemente de la opción que se hubiera dado. Cuando haya soltado el juguete, lo mantenemos cerca del perro para que se autocontrole sin morderlo, ya que si lo apartamos, la tendencia que generamos es que vaya hacia él para volver a morderlo.
Bloque III:
Este bloque está enfocado a facilitar y trabajar la desconexión del ejercicio y conseguir un estado emocional más calmado y relajado. Para finalizar el ejercicio de forma relajada y calmada, empezaremos a jugar pero de forma menos intensa relajando el juego. Una vez más tranquilo, pediremos SUELTA, cogeremos el juguete, diremos NADA MÁS, seguido de un cruce de brazos muy visible, lo guardaremos, y daremos por finalizado el trabajo.
Con este método vamos a mejorar la capacidad del perro para seguir comandos e interactuar positivamente. Además, vamos a fomentar un vínculo más fuerte entre el animal y su tutor.
Si necesitas más detalles sobre cómo implementar estas técnicas y maximizar los beneficios del espacio de juego en la formación de tu perro, te invitamos a visitar nuestro sitio web.
¡No esperes más para transformar la manera en que tu perro aprende y juega! Haz clic aquí para aprender más y ver nuestros recursos disponibles.